El blanco te queda bien
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“Noviembre y diciembre
son como Madrid en invierno, pero en enero febrero suele haber -20º” no es una
frase que se olvide fácilmente cuando te avisan al escoger Varsovia como destino
Erasmus, tampoco esperábamos que a principios de noviembre fuese a nevar, pero
habiendo temperaturas entre -2º y 4º tampoco sé qué esperábamos.
Es cierto que
este año ha llegado la ola de frío muy pronto, por mediados o finales de octubre,
tanto que pasamos del frío otoño en Varsovia a lo que en Madrid sería frío
polar de invierno. A la semana ya estábamos acostumbrados y hechos a llevar
gorro y bufanda tras tener los primeros constipados e irritaciones de garganta,
pero no creíamos que a 9 de noviembre por mucho que pusiera en el móvil que iba
a nevar, íbamos a despertarnos e iba a estar nevado, pues sí, así fue. El 9 de
noviembre amanecimos en Varsovia con el cielo muy nublado y con cierto rastro
de nieve en el suelo sin terminar de cuajar, además de la que seguía cayendo. Además,
al igual que la lluvia, aquí, cae constantemente y una gran cantidad.
El día 10 siguió
cayendo agua-nieve y nieve a ratos con mucho más frío, pero sabiendo que cuando
en el móvil pone que nieva, es que va a nevar. Por eso al día siguiente, que
además era el Día de la Independencia de Polonia del que ya os hablaré en otro
post más detallado, nos despertamos y estaba toda la ciudad nevada, no estaba
nevada como en las películas de una capa de nieve enorme, pero si había cuajado
bien y seguía nevando y siguió nevando todo el día sin parar, ¡EN NOVIEMBRE!
Ese fue el último
día que nevó, pero el frío ha continuado hasta esta semana, por eso hizo que la
nieve se mantuviera en el suelo y los tejados de las casas durante casi 5 días
al no subir de 1º.
Ahora parece que
se ha pasado el temporal de frío y que estamos con temperaturas normales de un noviembre
cualquiera, entre 3º y 12º que por lo menos no nos congelan y nos dejan ir
sobreviviendo y prepararnos para el frío de Febrero…
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